SUEHIRO MARUO
Maruo es un autor que no provoca indiferencia: admiración o repulsión casi por partes iguales. Desde la primera publicación de La sonrisa del vampiro, dejó una impresión apabullante en el lector, ofrecía un estilo muy personal y peculiar, a la vez que atractivo y horripilante. Un autor imprescindible para comprender la amalgama de estilos que tiene el arte del manga.
Influenciado por el bloody ukiyo-e, las ilustraciones son bellas y adorablemente atractivas a la vez que conmovedoramente desquiciantes. Maruo consigue una narrativa que se acerca a su estilismo de manera brillante, dando lugar a una historia que desafía a la moral del lector. Amenizada con ilustraciones espectaculares, apabullantes y gustoso por enseñarnos primeros planos intentando que el lector disfrute de las escenas de violencia, regocijándose en algunas viñetas. A veces nos muestra una escena de violencia en varios planos diferentes del mismo cada viñeta se convierte en una pequeña obra de arte, que podemos admirar repetidamente o más bien todo lo contrario. Depende del espectador o del lector, pasar rápidamente las páginas para no regocijarnos en el horror presentado